jueves, 21 de enero de 2010

LOS JESUITAS EN LA IGLESIA ADVENTISTA.


Ante la terrible realidad y enorme peligro que representan los jesuitas en el mundo, cabe preguntarse: ¿han tenido que ver con la Iglesia Adventista del Séptimo día, la depositaria de las grandes verdades del tiempo del fin? Lamentablemente, debemos reconocer que sí, tal cual estaba profetizado por Elena G. De White. En 1867 E. de White recibió una notable visión sobre la injerencia católico jesuítica en la Iglesia Adventista, estando en B. Creek. Aparece en el tomo 1 de los “Testimonios para la Iglesia”, en inglés, en la página 577, y la transcribimos a continuación:

“... Esa noche soñé que yo estaba en Battle Creek mirando hacia el lado de afuera de la ventana de la puerta y vi una compañía marchando hacia la casa, de dos en dos. Parecían severos y decididos. Yo los conocí bien y me volví a abrir la puerta del salón para recibirlos, pero pensé que debería mirar nuevamente. La escena había cambiada. La compañía ahora presentaba la apariencia de una procesión católica. Uno sostenía en su mano una cruz, otro una caña. Y cuando se acercaron, el que estaba cargando una caña hizo un círculo alrededor de la casa, diciendo tres veces: "Esta casa está proscripta. Los bienes deben confiscarse. Ellos han hablado contra nuestra santa orden". El terror se apoderó de mí, y corrí atravesando la casa, saliendo por la puerta norte, y me encontré en medio de una compañía, algunos de los cuales yo conocía, pero no me atreví a hablarles una palabra a ellos por temor a ser traicionada. Yo intenté buscar un lugar retirado donde pudiese llorar y orar sin encontrar ojos ávidos e inquisitivos dondequiera me volviese. Frecuentemente repetía: "¡Si tan sólo pudiera entender esto! ¡Si ellos me dijesen lo que he dicho o lo que he hecho! " “Yo lloré y oré mucho cuando vi nuestros bienes confiscados. Traté de leer simpatía o piedad hacia mí en las miradas de los que estaban a mi alrededor, y me fijé en los semblantes de varios de quienes yo pensaba que me hablarían y me conforta-rían si no temiesen ser observados por otros. Hice un intento de escapar de la multitud, pero al notar que me estaban vigilando, oculté mis intenciones. Comencé a llorar en voz alta, diciendo: "¡Si me dijeran tan sólo lo que he hecho o lo que he dicho! " Mi marido que estaba durmiendo en una cama en el mismo cuarto me oyó llorar en voz alta y me despertó. Mi almohada estaba mojada con las lágrimas, y una triste depresión de espíritu estaba sobre mí." Testimonies for the church, T 1, pp. 577 – 578

Los bienes de EGW son indudablemente sus escritos. Ellos “han hablado contra nuestra santa orden”, obviamente, una orden católica que se apoderaría solapadamente de la Asociación General (en aquella época, en Battle Creek). ¿Contra cuál “santa orden” habló E. de White? No hay confusión posible: contra los jesuitas de Roma. Bajo la inspiración del Espíritu Santo, Elena de White escribió (“habló”) lo siguiente de los jesuitas de Roma:

“Pasados los primeros triunfos de la Reforma, Roma reunió nuevas fuerzas con la esperanza de acabar con ella. Entonces fue cuando nació la orden de los jesuitas, que iba a ser el más cruel, el menos escrupuloso y el más formidable de todos los campeones del papado. Libres de todo lazo terrenal y de todo interés humano, insensibles a la voz del afecto natural, sordos a los argumentos de la razón y a la voz de la conciencia, no reconocían los miembros más ley, ni más sujeción que las de su orden, y no tenían más preocupación que la de extender su poderío. El Evangelio de Cristo había capacitado a sus adherentes para arrostrar los peligros y soportar los padecimientos, sin desmayar por el frío, el hambre, el trabajo o la miseria, y para sostener con denuedo el estandarte de la verdad frente al potro, al calabozo y a la hoguera. Para combatir contra estas fuerzas, el jesuitismo inspiraba a sus adeptos un fanatismo tal, que los habilitaba para soportar peligros similares y oponer al poder de la verdad todas las armas del engaño. Para ellos ningún crimen era demasiado grande, ninguna mentira demasiado vil, ningún disfraz demasiado difícil de llevar. Ligados por votos de pobreza y de humildad perpetuas, estudiaban el arte de adueñarse de la riqueza y del poder para consagrarlos a la destrucción del protestantismo y al restablecimiento de la supremacía papal."

“Al darse a conocer como miembros de la orden, se presentaban con cierto aire de santidad, visitando las cárceles, atendiendo a los enfermos y a los pobres, haciendo profesión de haber renunciado al mundo, y llevando el sagrado nombre de Jesús, de Aquel que anduvo haciendo bienes. Pero bajo esta fingida mansedumbre, ocultaban a menudo propósitos criminales y mortíferos. Era un principio fundamental de la orden, que el fin justifica los medios. Según dicho principio, la mentira, el robo, el perjurio y el asesinato, no sólo eran perdonables, sino dignos de ser recomendados. Siempre que vieran los intereses de la iglesia. Con muy diversos disfraces se introducían los jesuitas en los puestos del estado, elevándose hasta la categoría de consejeros de los reyes, y dirigiendo la política de las naciones. Se hacían criados para convertirse en espías de sus señores. Establecían colegios para los hijos de príncipes y nobles, y escuelas para los del pueblo; y los hijos de padres protestantes eran inducidos a observar los ritos romanistas. Toda la pompa exterior desplegada en el culto de la iglesia de Roma se aplicaba a confundir la mente y ofuscar y embaucar la imaginación, para que los hijos traicionaran aquella libertad por la cual sus padres habían trabajado y derramado su sangre. Los jesuitas se esparcieron rápidamente por toda Europa y doquiera iban lograban reavivar el papismo.”

“Para otorgarles más poder, se expidió una bula que restablecía la Inquisición. No obstante el odio general que inspiraba, aun en los países católicos, el terrible tribunal fue restablecido por los gobernantes obedientes al papa; y muchas atrocidades demasiado terribles para cometerse a la luz del día, volvieron a perpetrarse en los secretos y obscuros calabozos. En muchos países, miles y miles de representantes de la flor y nata de la nación, de los más puros y nobles, de los más inteligentes y cultos, de los pastores más piadosos y abnegados, de los ciudadanos más patriotas e industriosos, de los más brillantes literatos, de los artistas de más talento y de los artesanos más expertos, fueron asesinados o se vieron obligados a huir a otras tierras.” (CS 249, 250)

Pero podría alguien preguntarse: ¿cómo podrían los jesuitas llegar a tomar el control de la Asociación General Adventista? La respuesta es simple y a la vez sorprendente para quienes no están familiarizados con los métodos de los jesuitas: LA INFILTRACIÓN. Esta perversa estrategia consiste en fingirse adventista, ingresar a la iglesia como cualquier miembro, fingiendo una conversión que nunca existió, y una vez adentro de la misma, comenzar una tarea sutil e insidiosa, en equipo con los otros infiltrados, de acuerdo a los objetivos cuidadosamente planeados por el vaticano. Así los infiltrados católicos, con los jesuitas a la cabeza, van escalando posiciones dentro de la Iglesia, apoyándose y votándose unos a otros en las diferentes Juntas, tomando control de las juntas de iglesia, de las Asociaciones, y de todas las instituciones del pueblo adventista. De esta manera llegarían, poco a poco, al control de la autoridad máxima a nivel mundial de la Iglesia.

Digamos de paso que esta estrategia satánica no es nueva ni fueron los jesuitas los primeros en utilizarla. Ya los judíos la utilizaron contra la iglesia cristiana en el primer siglo de esta era, y los apóstoles la denuncian claramente:

Gálatas 2: 4: “y esto a pesar de los falsos hermanos introducidos a escondidas, que entraban para espiar nuestra libertad que tenemos en Cristo Jesús, para reducirnos a esclavitud,”

2ª Corintios 11: 13 – 15: “Porque éstos son falsos apóstoles, obreros fraudulentos, que se disfrazan como apóstoles de Cristo. Y no es maravilla, porque el mismo Satanás se disfraza como ángel de luz. Así que, no es extraño si también sus ministros se disfrazan como ministros de justicia; cuyo fin será conforme a sus obras.”

Judas 4: “Porque algunos hombres han entrado encubiertamente, los que desde antes habían sido destinados para esta condenación, hombres impíos, que convierten en libertinaje la gracia de nuestro Dios, y niegan a Dios el único soberano, y a nuestro Señor Jesucristo.”

Pero la iglesia primitiva supo enfrentar y rechazar a los infiltrados, neutralizando así su nefasta influencia. Jesús elogió la iglesia cristiana primitiva por esta actitud, de reconocer, poner de manifiesto y rechazar a todo falso apóstol, a todo infiltrado:

Apoc 2: 2: "Yo conozco tus obras, y tu arduo trabajo y paciencia; y que no puedes soportar a los malos, y has probado a los que se dicen ser apóstoles y no lo son, y los has hallado mentirosos;”

Al tomar control los jesuitas de Roma del liderazgo máximo adventista, lógicamente, ocurrirían muchos cambios lamentables dentro de todos los niveles de la iglesia adventista. Es obvio que, llegado el tiempo del cumplimiento de esta visión, los jesuitas, junto con todo su equipo de subalternos católicos que también se infiltrarían en la Iglesia Adventista, no sólo tomarían el control de la Asociación General, sino de todos los centros adventistas en el mundo (Asociaciones, Uniones, Divisiones, Iglesias, Instituciones diversas, etc.) No nos olvidemos que tienen muchos recursos, tanto humanos como monetarios. ¿Podemos encontrar hoy las huellas de su trabajo destructor dentro de la Iglesia Adventista? SI; estrategias que difieren un poco entre sí, de acuerdo a las características de la iglesia en cada lugar, pero que llevan siempre al mismo fin: hacer desaparecer la verdadera espiritualidad y consagración entre los adventistas, acercar a Roma lo más posible a la iglesia adventista, impedir de todas maneras la predicación de los mensajes de los tres ángeles, y finalmente, preparar a la Iglesia para la aceptación de la obra cumbre del papado: la ley dominical, con lo cual la iglesia adventista renegará del sábado, tal como también E. de White lo profetizó.

“Yo vi que la iglesia nominal y los Adventistas nominales, como Judas, nos entregarán a los Católicos para obtener su influencia para luchar contra la verdad. Los santos serán entonces un pueblo oscuro, poco conocido para los Católicos; pero las iglesias, y los Adventistas nominales que conocen nuestra fe y costumbres (porque ellos nos odiaron a causa del Sábado, ya que no pudieron refutarlo) traicionarán a los santos y los denunciarán a los Católicos como los que desprecian las instituciones del pueblo; es decir, que ellos guardan el Sábado y desprecian el domingo.” (Spalding Magan Collection, p. 1). WWW.INFONOM.COM.Gracias Emmanuel.

7 comentarios:

Anónimo dijo...

Definitivamente.... concuerdo contigo... hay cosas que de verdad, notoriamente son del enemigo dentro de la iglesia. Es cosa de ver la falta de identidad ya sea en lo musical, en las artes y en la importancia que le damos a los consejos de Elena (hoy en día no significa casi nada). Es mas, hace poquito descubrí de cantos e himnos que están en el Himnario "nuevo", que definitivamente tienen un sentido católico. Los conquistadores hacen la señal de una de las puertas que abren (según los satanistas) os portales del mundo de los espíritus, este es el Signo de Koth, palma extendida, dedos juntos y el pulgar agachado. Sin mencionar las distintas pirámides que tienen las clases progresivas. Los cantos JA, cada vez son mas fuera de norma (rockeros y poperos). La simbología del escudo nuevo de la iglesia (es una pirámide convertida, pulida, donde se identifican cosas netamente masonicas)

en fin

ESPERO QUE PODAMOS HACER UNA REFORMA GUIADOS DEL ESPÍRITU SANTO.

oremos por que nuestra Iglesia sea Purificada.

Unknown dijo...

Saludos, hermanos. Por ejemplo el himno 101 del "Nuevo" Himanario es netamente católico. Nada más el título lo dice todo, CABEZA SACRODSANTA. Ese es un término católico 100% y se consigue en partes como La Novena a Jesús Nazareno, el QUinto Día, que dice: " barrenando vuesta Cabeza con crueles es­pinas en forma de Corona. ¡Oh CABEZA SACROSANTA!" FUENTE: http://www.youtube.com/watch?gl=ID&feature=relmfu&hl=id&v=vxJt0VAXd4I

Anónimo dijo...

señores sería bueno que lean bien y se informes bien cuando deseen hacer algún alarde de conocimiento ya que no es completo por ejemplo cuando mencionan el símbolo de Koth, ya que ese Koth es un reino ficticio de unos de los tantos relatos de fantasía y ficción. Tengan cuidado sobretodo cuando se trata de desvirtuar a una iglesia porque en ese camino cogeran porciones de Harry Potter o de la piedra filosofal. Bueno si quieren leer mas sobre ese símbolo lean el relato ficticio completo y entenderan el contexto, sobretodo a aquellas personas que todo lo descontextualizan.

Anónimo dijo...

No estoy de acuerdo con la Reflexión que hace el autor de este artículo ubicado en el Blog. Me hago las siguientes preguntas frente al análisis que se hace de lo que escribió Elena G de White sobre su sueño.
¿Cuán valido y razonable es decir e interpretar que Los bienes de EGW mencionados por ella en el sueño son indudablemente sus escritos?
¿Es totalmente correcto concluir que la autora del escrito quiso decir que esta orden se apoderaría solapadamente de la Asociación General (en aquella época, en Battle Creek)? No es seguro aceptar indiscriminadamente la idea de que Elena G de White se refirió a una infiltración o mucho menos a una intervención de parte de la orden Jesuita en el seno de la IASD al contar este sueño.
Soy consciente de que los Jesuitas han elaborado planes para infiltrarse e intervenir en las denominaciones que protestaron contra la iglesia Católica, tal como lo presenta Alberto Rivera en su testimonio.
Ahora bien, no podría negarse la posibilidad de que existe o existió infiltración dentro de iglesia Adventista por parte de los jesuitas, Pero lo que no podríamos decir dogmáticamente es que ha existido intervención por parte de esta orden católica. Esto lo digo por dos razones fundamentales que enumero a continuación:

1. Si existiese intervención, lo primero que pasaría es que las doctrinas y creencias fundamentales de la IASD hubiesen cambiado años atrás.
2. La IASD a diferencia de las otras denominaciones todavía conserva y hace esfuerzos para que se mantenga la interpretación Historicista de los libros apocalípticos (Daniel y Apocalipsis), si echamos un vistazo al protestantismo antiguo que en algún momento sostuvo la interpretación historicista, nos daremos cuenta de que hoy ya no existe ni una denominación que interprete el apocalipsis o Daniel con este método, al contrario todas ven la apocalíptica con el método Preterista o futurista o con la mescla de ambos.

Si bien, ha existido un relajo en la IASD en cuanto a su misión de predicar el mensaje del tercer ángel y una neutralización la identidad en el pensamiento de los miembros de la IASD, no es muy justo achacarle este fenómeno a una intervención o infiltración departe de los jesuitas, lo más justo es considerar lo que dice apocalipsis sobre el mensaje de laodicea o sea la tibieza espiritual que impera dentro del cristianismo y de forma definida en la IASD, como también, el descuido de la lectura apocalíptica por parte de los miembros de la IASD y los énfasis que los administradores de la IASD le han dado a los miembros de esta.
Creo que ha llegado el tiempo de dejar de hacerle flacos favores a Dios con nuestras irreflexivas opiniones sobre la organización de la IASD que si bien no está pasando por un buen nivel espiritual pero no deja de ser un movimiento profético llamado a predicar el último mensaje para este mundo.

Anónimo dijo...

no estoy de acuerdo con la idea de que todo adventista esta involucrado con lo del dominio de los jesuitas en la iglesia ya que existe gente muy noble y pobre que Dios tiene en su pueblo que invocara el nombre del señor y esa gente
esta preparada para morir si es posible, por la verdad, gente que es vegetariana pero no lo anda gritando a todos que que vive la reforma. pero no porque no quiere comer carne sino porque no tienen,trabajo
vestuario,ni calzado, y anhelan el pronto regreso de Jesús porque en realidad
no saben que hacer.con tanta filosofía barata. cuando, la biblia dice el que creyere y fuere bautizado este sera salvo.marcos 16:16
sedan cuenta que los que mas hablan menos saben, ya que sus palabras son huecas, porque no aman a sus hermanos.

Unknown dijo...

Hola una pregunta porque en español no sale lo q en ingles dice este libro testimonio para la iglesia en la p 577, osea xq no fue traducido y donde puedo descargar el libro en ingles

Unknown dijo...

M. C. Wilcox – “El Espíritu Santo es la energía poderosa de la Deidad, la vida y el poderde Dios fluyendo de Él hacia todas las partes del universo, haciendo conexión viviente entre Su trono y toda la creación. […] Ello por lo tanto hace a Cristo omnipresente. […]Entonces, el Espíritu está personificado en Cristo y en Dios* pero nunca revelado como una persona separada. Nunca se nos ha dicho que le oremos al Espíritu; sino a Dios por el Espíritu. Nunca encontramos en las Escrituras oraciones al Espíritu, sino por el Espíritu.”(M. C. Wilcox, 1911, Questions and Answers Gathered From the Question CornerDepartment of the Signs of the Times, p. 181, 182)

*Otro claro pasaje que explica lo que los escritores se refieren cuando hablan de la Persona del Espíritu. Wilcox lo dice a continuación:
“La razón por la cual las Escrituras hablan de el Espíritu Santo como una persona es que trae a nosotros, y a toda alma creyente, la presencia personal de nuestro Señor Jesucristo.”(M. C. Wilcox, Questions and Answers, vol. 11, 1919, version de 1938 p. 37-39)“La presencia de Dios es por lo tanto Su Santo Espíritu; y el Espíritu Santo es por lo tantola vida de Dios.” (M. C. Wilcox, Signs of the Times, 2 jun. 1989)